Aceite de Rosa mosqueta

Obtención

Aceite procedente de las bayas de la rosa mosqueta (Rosa canina) obtenido mediante el método de extracción por CO₂ supercrítico -novedosa tecnología que permite mantener todos los principios activos intactos a la concentración más elevada-. SIN tratamientos químicos o térmicos de prensado para su obtención. Procedente de cultivos ecológicos.

Composición lipídica

Presenta hasta un 80% de ácidos grasos poliinsaturados, destacando el ácido linoleico:

• Ácido linoleico (ω-6): 48%
• Ácido α-linolénico: 32%
• Ácido oleico: 15%
• Ácido palmítico: 3%
• Ácido esteárico: 2%
• Ácido araquídico: 1%
• Ácido vaccénico: 0,5%
• Ácido palmitoleico: 0,2%

Beneficios directos para la piel

El aceite de rosa mosqueta es utilizado en todo tipo de formulaciones cosméticas por combinar propiedades emolientes, regenerantes y epitelizantes. Rehidrata la piel seca con una gran efectividad, mejorando enormemente los niveles de humedad, especialmente en pieles maduras que tienen más complicaciones a la hora de producir colágeno. Numerosos estudios científicos han demostrado que el aceite de rosa mosqueta puede atenuar y tratar eficazmente cicatrices quirúrgicas, estrías y quemaduras; tiene la capacidad de reemplazar el tejido cicatricial fibroso y engrosado (cicatrices queloides) por una piel nueva y saludable. También mejora el color y la textura de las marcas de quemaduras o cicatrices del acné, aumentando la elasticidad de la piel.

Grado comodogénico

El aceite de rosa mosqueta está clasificado como NO comodogénico (clasificación nº 1), ideal para todo tipo de pieles por sus propiedades regeneradoras, reparadoras, antioxidantes y epitalizantes. Buena absorción gracias a su alto contenido en PUFAs, no engrasa la piel. Apto para pieles sensibles, aunque por su alto contenido en pro-vitamina A recomendamos utilizar diluida en aceites portadores.